sábado, 21 de noviembre de 2009

EL DESTINO DEL IMPOTENTE ES EL SUICIDIO

EL DESTINO DEL IMPOTENTE ES EL SUICIDIO.




Por Gilberto Rodriguez



Cuando salí de la prisión, rumbo al exilio me hice una promesa: "Yo nunca he de establecer controversia con aquellos que combaten la tirania, no importa cuan distintas sean nuestras ideas y formas de actuar. Y el expediente anda por ahí, transparente, a la luz del sol. Prueba es que nunca he usado espejos retrovisores, fuera del auto, ni oculto mi nombre tras la manigua del computador. Yo creo como Marti, que el hombre honesto vive y muere de cara al sol.



Pero no soy perfecto, ni siquiera en eso.



Y en cierto modo he sido y si me joden un poco, sigo siendo guerrillero, gústele a quien le guste y que parta un rayo a quien no. Mi poesia es mi filosofia de amor, que de odios no entiendo, pero para combatir tengo tres armas; a saber:



Tengo una pluma que puede elevarse a la mas alta academia, una lengua poderosa con siete afinados filos de alto grado acerino, y se apretar un gatillo cuando la oportunidad lo requiere, tal cual se aguantar el dolor de las heridas y las torturas que los esbirros reparten. He ahi mi yo.



Yo no lucho para complacer a nadie, solo a mi espirirtu de amor a la libertad, la justicia y la razón. Eso significa que yo defiendo la democracia en el mas elevado grado y expresion de pureza. Para mi, hasta los malos tienen sus derechos...si los saben defender.



Como tal, a veces puedo compartir un cafe con un adversario, si este sabe hablar como persona civilizada, siquiera por un instante. Y como el buen cocinero tambien se que debajo de cada alacena hay cucarachas y ratones.





Para esos, insecticida y gatos. Yo no tengo tiempo ni energias para esos infelices. Mi interes es la cabeza.

El jefe de las ratas y de las zabandijas es lo unico que cuenta. Lo demas es perder el tiempo.





Pero, sinembargo, quiero dejar bien claro y escuetamente establecido aqui. Yo no discrimino. La Patria es de todos; la justicia no es propiedad, ni la razón tampoco es propiedad privada. Ante la justicia todos somos iguales. Y cuando uno dedica su vida entera a luchar por la libertad, lo hace con todos y para el bien de todos. De modo, que, aquel que piensa como yo, es mi defendido; el que piensa distinto, es mi defendido, y el que se equivoca, en mi tiene un amigo; tanto como el que no sabe luchar, el que no tiene el valor para hacerlo, el que se siente victimizado y el simple sinvergüenza, encuentran en mi un defensor porque, la patria es de todos y para el bien de todos.



Yo no comparto la conducta de aquellos que piensan que la justicia y el derecho estan de su lado; no, esas cosas son de todos.



Y para todos.



Y cuando digo para todos quiero decir que, hasta a las ratas, cuando se les echa el veneno, se les saca para el cesto de basura, no se les deja tirados debajo de la alacena.

Y al que le venga el sayo, que se lo ponga y le ponga un lacito rojo para que luzca mejor.





Y para aquel cuya impotencia mental, porque en las alforjas que su padre le puso a sus mulas no sabe cargar bolas, para ese tambien hay que luchar por su libertad, porque al pobre, sabedor de que no posee lo necesario, algo asi como el soldado que no tiene fusil, a veces se vuelve contra sus hermanos, y contra quienes lo defienden y, hasta es que ni siquiera son malas personas, no; es que se siente culpable, se siente abandonado hasta de dios, miserable cucaracha...y para el hay tambien que crear hospitales. en una patria libre.

Por lo demas, quienquiera que por su propia impotencia, de cualesquiera forma que esta sea, se siente compelido a insultar ocultandose en las malezas, para desahogar sus miserias, tal vez debe, en su proximo viaje a la isla, tomarse un buen purgante de higuereta. Eso le puede ayudar a desahogar sus excrementos mentales.

Alli hay una letrina en el poder.



Pa'Lante!

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